“Un hammam (en grafía árabe, حمام), también conocido como baño árabe, baño turco o hammam, es una modalidad de baño de vapor que incluye limpiar el cuerpo y relajarse.” Wikipedia.
Es importante indicar que un Hammam tiene los mismos fines que un Spa pero se trata de una filosofía distinta.
Hace unos días utilice los servicios del Hammam Oasis que hay en la zona de la calle de Alcalá pasado Ventas.En esta instalación a colaborado Europea Térmica Eléctrica en el diseño, construcción y ha suministro el equipo productor de vapor para el baño turco modelo Bete de 7,5kw para un local de 32m3.
Anteriormente he visitado un Hammam en Estambul y otro en Túnez que son dos referencias en las que no había recibido una buena impresión.
En Estambul se trataba de un centro muy grande, con muchísima gente, mucho ruido y muy poca higiene, el de Túnez era un local nuevo con una decoración clásica árabe, algo frio y con la sala de vapor que tenía un calor insoportable, no te podías sentar pues te quemabas las nalgas y el suelo también quemaba, en suma dos experiencias poco agradables y nada relajantes.
El local que he visitado esta vez está situado en un barrio popular y se percibe la sensación de que los propietarios no han pretendido impactar con una imagen espectacular, solo pretenden dar un buen servicio a los clientes.
Las instalaciones son amplias y han utilizado materiales que garantizan la limpieza y la higiene, colores amables y una iluminación suficiente y no agresiva.
El Hammam está formado por la recepción, vestuarios, baño de vapor, camillas para la limpieza y tratamientos de barros, piletas individuales para hacer una limpieza personal, duchas y sala de relajación para disfrutar de las infusiones. También tienen una flotarium y una sala polivalente para diversas actividades.
El personal es muy amable y profesional y todo el centro transmite tranquilidad y confianza.
El circuito que hice fue baño de vapor que tenía una temperatura de 41ºC y un agradable ambiente de niebla, me dieron un bolsita con jabón beldi para aplicar por todo el cuerpo y uno de los masajistas me lo aplico por la espalda, después de 45 minutos pase a la limpieza con guante de kessa para eliminar las células muertas, posteriormente me aplicaron arcilla de ghassoul que arrastra todos los restos y aporta minerales a la piel y finalmente me limpiaron todo el cuerpo con jabón.
La experiencia fue muy gratificante y las personas que tienen experiencia en la rutina del Hammam podrán confirmar la excelencia del servicio y las instalaciones y los que no lo han vivido todavía tendrán la oportunidad de sentir como el cuerpo agradece el buen trato que recibe, tanto en sensaciones físicas como mentales.